Jesús Hernández | LA PRENSA de Lara.- Los puntos de contención que ejecutan los funcionarios de la Policía Nacional y la Guardia Nacional desde que se radicalizó la cuarentena están más estrictos. Ya los conos de seguridad en medio de una canal de la vía no son suficientes para evitar que las personas pasen y ahora atraviesan hasta carros.
«Señor funcionario yo vivo ahí mismo. Hágame el favor» era la súplica que Jhoan Suárez le hacia a un policía en la intercomunal Barquisimeto – Cabudare a la altura del Carabalí. El señor había salido bien temprano a comprar alimentos y cuando regresaba a su casa en Yacural, sector que se ubica en la frontera entre Iribarren y Palavecino, se encontró con el punto de contención.
«Fui al centro de Cabudare a comprar un cartón de huevos que necesito y ahora no me dejan pasar, vivo ahí mismo en Yacural, me tendré que quedar aquí entonces» refutó con mucha molestia el hombre quien no comprendía que lo restringido del paso ha aumentado debido a los casos de coronavirus en Lara.
En la intercomunal hay al menos tres puntos de funcionarios así como en la avenida Ribereña. En Iribarren también hay desde el Cardenalito (este y oeste), hacía el norte de Barquisimeto al igual que el centro, pero aquí el tránsito y el tráfico es incontrolable.
«Lo que sí se les hace muy complicado a los funcionarios es frenar a las miles de personas que andan caminando. «La gente debe poner de su parte también» soltó un policía en forma de queja.
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