Eduardo Soteldo | LA PRENSA de Lara.- «Los grupos irregulares que hoy la dictadura acusa de desestabilizadores fueron creados por el mismo régimen para sembrar terror y mantener el control interno de los sectores populares», es lo que señala el Gobierno interino de Juan Guaidó, con respecto al despliegue de oficiales en el barrio José Félix Ribas de Petare, que dejó 12 abatidos.
La administración de Guaidó denuncia que fue el mismo Gobierno de Nicolás Maduro el que proveyó de armamentos a las bandas delictivas y ahora que rompieron su «vínculo», dispusieron de otros grupo para eliminar a los delincuentes. Denuncian que para lograr este cometido fueron liberados presos para recuperar el control de la zona petareña.
«Fueron creadas, dotadas y empoderadas por el narcoestado de Nicolás Maduro y, en el momento que dejaron de apoyarlos, pasaron a ser atacados por otros grupos amparados por la dictadura. Algunos de estos, incluso, fueron liberados de las cárceles en días recientes para «recuperar» el control del territorio», señalaron.
Además, denuncian que quienes sufren por las «guerras internas» del Gobierno son los propios ciudadanos. Por esto, hacen un llamado a la comunidad internacional a «mantener alerta máxima ante la nueva escalada represiva de la dictadura de Nicolás Maduro». También fue elevada la denuncia a la comisión de Derechos Humanos de la ONU y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Alegan que aún no se conocen las identidades de los fallecidos «ni se han ofrecido detalles de por qué motivo fueron ejecutados extrajudicialmente».
En el operativo se presume que los cuerpos policiales iban en busca de «Wilexis», el hampón que mantiene el control de la zona. Sin embargo, pese a las informaciones de al menos 12 abatidos, entre ellos un jugador de básquet llamado Brian Cedeño que sería «inocente» según los vecinos, no se tienen noticias de «Wilexis».
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