Daimar Díaz | LA PRENSA de Lara.- Viviendas y comercios del sector El Trompillo parte baja no cuentan con servicio telefónico desde hace más de tres años, cuando el cableado que les facilitaba el servicio fue hurtado por antisociales.
La pérdida de la comunicación con sus seres queridos fuera del país y las limitantes a las que han sido expuestos los niños para realizar sus tareas escolares por falta de internet, han sido algunos de los padecimientos de estas 200 familias que claman les sea sustituido el cableado telefónico.
«Tengo tres hijos fuera del país y mi único medio de comunicación era el Facebook, pero desde que nos robaron los cables, no puedo hablar con ellos, porque ni al teléfono de la casa me pueden llamar porque no tiene línea» comentó Mirian Peraza.
Los niños también han sido fuertemente afectados por esta situación, la falta de bibliotecas y el alto costo de los libros, los llevaban a realizar sus investigaciones a través de internet, pero al no contar con este servicio se ven obligados a trasladarse a sectores aledaños para poder cumplir con sus asignaciones escolares.
«Nos toca llevar a los niños al cyber de Los Luises que es lo más cercano que tenemos, pero la hora de internet en estos sitios es muy costosa y en ocasiones se tardan hasta dos horas» añadió Daniel Sánchez.
Las transferencias se habían vuelto la alternativa de los comerciantes en el sector ante la inoperatividad de los puntos de ventas, pero las fallas en servicio eléctrico ocasionaron que estos establecimientos registren pérdidas de clientes.
Doble racionamiento
Entre las quejas de los habitantes de El Trompillo está también la doble dosis de cortes eléctricos que reciben a diario, pues ellos afirman que en las mañanas el plan de administración de carga es aplicado durante cuatro horas, mientras que en la noches duran hasta seis horas sin electricidad en la comunidad.
«Estamos cansados de ver como se nos dañan nuestros electrodomésticos por los que tanto hemos trabajado» puntualizó Carlos Acosta.
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